La región de las Américas es declarada libre de sarampión
La región de las Américas es la primera del mundo en ser declarada libre de sarampión, una enfermedad viral que puede causar severos problemas de salud, incluyendo neumonía, ceguera, inflamación del cerebro e inclusive la muerte. Este logro culmina un esfuerzo de 22 años, que involucró una amplia administración de la vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubéola en el continente.
La declaración de la eliminación del sarampión fue entregada hoy por el Comité Internacional de Expertos (CIE) de Documentación y Verificación de la Eliminación del Sarampión, Rubéola y Síndrome de Rubéola Congénita en las Américas, durante el 55.o Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), a la que esta semana están asistiendo los ministros de Salud de la región.
El sarampión se convierte así en la quinta enfermedad prevenible por vacunación en ser eliminada en las Américas, tras la erradicación regional de la viruela en 1971, la poliomielitis en 1994, y en 2015 de la rubéola y del síndrome de rubéola congénita.
“Hoy es un día histórico para nuestra región y sin duda para el mundo. Es la prueba del notable éxito que se puede lograr cuando los países trabajan juntos en solidaridad para alcanzar una meta común”, subrayó Carissa F. Etienne, Directora de la OPS/OMS. “Es el resultado de un compromiso que se hizo más de dos décadas atrás, en 1994, cuando los países de las Américas se comprometieron a terminar con el sarampión al comienzo del siglo XXI”, añadió.
Antes de comenzar la vacunación masiva en 1980, el sarampión causaba cerca de 2.6 millones de muertes al año en el mundo. En las Américas entre 1971 y 1979 ocasionó cerca de 101,800 defunciones. Un estudio sobre la efectividad de la eliminación del sarampión en América Latina y el Caribe ha estimado que con la vacunación, 3,2 millones de casos de sarampión y 16.000 muertes habrán sido prevenidos en la región entre 2000 y 2020.
“Este hito histórico nunca habría sido posible sin el firme compromiso político de nuestros Estados Miembros de garantizar que todos los niños tengan acceso a las vacunas que salvan vidas. No habría sido posible sin la generosidad y el compromiso de los trabajadores de salud y los voluntarios que han trabajado arduamente para llevar los beneficios de las vacunas a todas las personas, incluidas las comunidades vulnerables y de difícil acceso. Tampoco habría sido posible sin el fuerte liderazgo y la coordinación de la OPS, oficina regional de la OMS para las Américas”, afirmó Etienne.
Desde 2002, cuando en las Américas se notificó el último caso endémico de sarampión, la región había interrumpido la transmisión del virus. Como el sarampión sigue circulando a nivel mundial, en algunos países se habían notificado casos importados de otras partes del mundo. El Comité Internacional de Expertos (CIE) de Documentación y Verificación de la Eliminación del Sarampión, Rubéola y Síndrome de Rubéola Congénita en las Américas recibió entre el año pasado y agosto de este año, las evidencias presentadas por todos los países de la región de la eliminación de esta enfermedad y las consideró satisfactorias para brindar esta declaración. El proceso tomó seis años de trabajo con los países para documentar las evidencias de la eliminación.
El sarampión es una de las enfermedades más contagiosas y afecta en particular a los niños. Se transmite por gotitas que se transmite por aire o contacto directo de secreciones procedentes de la nariz, boca y garganta de personas infectadas. Los síntomas consisten en fiebre alta, erupción generalizada en todo el cuerpo, congestión nasal, ojos enrojecidos. Puede causar complicaciones graves, tales como ceguera, encefalitis, diarrea intensa, infecciones del oído y neumonía, sobre todo en niños con problemas de nutrición y pacientes inmunodeprimidos.
Como resultado de los esfuerzos de eliminación global del sarampión, en 2015 sólo se reportaron 244,704 casos a nivel mundial, lo que significó un descenso importante respecto a años anteriores. Sin embargo, más de la mitad se registraron en África y Asia.
Para mantener la eliminación del sarampión, la OPS/OMS y el Comité Internacional de Expertos para la Eliminación del Sarampión y la Rubéola ha recomendado a todos los países de las Américas que fortalezcan la vigilancia activa y mantengan la inmunidad de su población a través de la vacunación.
“Quisiera destacar que nuestro trabajo en este frente aún no termina. No podemos caer en la complacencia con este logro, sino que más bien debemos protegerlo cuidadosamente”, advirtió Etienne. “El sarampión sigue circulando ampliamente en otras partes del mundo, por lo que debemos estar preparados para responder a los casos importados. Es fundamental que sigamos manteniendo las altas tasas de cobertura de vacunación y es crucial que los casos sospechosos de sarampión sean reportados de inmediato a las autoridades para que le hagan seguimiento”, añadió.
Proceso para eliminar el sarampión
En la década de 1990, se registró un descenso de casos, pero la disminución más notoria se dio luego de que la región lanzara su iniciativa de eliminar el sarampión en 1994. Ese año, los países de las Américas establecieron el objetivo de eliminar la transmisión endémica del sarampión de manera colectiva para el año 2000, a través de la implementación de estrategias de vigilancia y vacunación recomendadas por la OPS/OMS.
La estrategia de eliminación de la OPS/OMS para terminar con el sarampión se basó en tres pasos:
- hacer por única vez una campaña nacional para ponerse al día con la vacuna contra el sarampión, dirigida a niños de entre 1 y 14 años;
- fortalecer la vacunación de rutina para alcanzar un mínimo de 95% de los niños cada año;
- hacer campañas masivas de seguimiento cada cuatro años, con el fin de vacunar a un mínimo del 95% de los niños de 1 a 4 años con una segunda dosis de vacuna.
Siguiendo esta estrategia, el último brote endémico se registró en Venezuela en 2002. Sin embargo, algunos países de la región siguieron notificando casos importados. Entre 2003 y 2014, el número total de casos de sarampión importados o relacionados a una importación llegó a 5.077 en las Américas.
Tras declarar la eliminación de la rubéola y el síndrome de rubéola congénita en 2015, el Comité Internacional de Expertos esperó a que se presentaran las evidencias de la interrupción de un brote de sarampión en Brasil, que había comenzado en 2013 y duró más de un año. Después de un año de acciones dirigidas y extrema vigilancia, el último caso de sarampión en Brasil fue registrado en julio de 2015.
Con este logro y ante el hecho de que la región ha sostenido la eliminación por más de 12 años, el Comité Internacional de Expertos aceptó las evidencias presentadas por los países y declaró la eliminación del sarampión en las Américas.
Los socios claves involucrados en la eliminación del sarampión al igual que la rubéola incluyen a los ministerios de salud de los países miembros de la OPS/OMS, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Salud Canadá, la Agencia Canadiense para el Desarrollo Internacional (CIDA), la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), el Instituto de Vacunas Sabin, el Instituto Serum de India, March of Dimes, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y la Iniciativa Sarampión-Rubéola, una coalición de socios globales, incluyendo la Federación Internacional de la Cruz Roja/Media Luna Roja, la Fundación ONU, UNICEF y la OMS.